Internet Society rechaza el bloqueo de direcciones IP por “socavar las propiedades fundamentales de Internet”

Imagine intentar impedir la entrada a un edificio en una ciudad cerrando toda una calle. En esa calle podría haber hospitales, escuelas y viviendas, por lo que al cerrarla se interrumpirían múltiples servicios esenciales para muchas personas.

Así empieza la demoledora declaración publicada en castellano1 por una de las organizaciones más relevantes para el funcionamiento de la red, Internet Society, en la que se posiciona claramente en contra de los cada vez más habituales bloqueos de direcciones IP. “Si bien el bloqueo de contenido puede parecer una solución rápida para restringir el acceso a material ilegal, en la práctica suele resultar ineficaz y con frecuencia termina bloqueando servicios legítimos, lo que afecta tanto a usuarios como a empresas”, añade.

Internet Society fue creada en 1992 por algunos de los arquitectos de los protocolos fundamentales con los que funciona la red, con el fin de promover que internet sea abierto y accesible. Sus fundadores son Vinton Cerf y Robert Kahn, creadores del protocolo TCP/IP que transporta gran parte del tráfico de internet. De IS dependen organizaciones como la IETF, que se encarga de aprobar los famosos RFC que dan lugar a nuevos estándares. Entre sus miembros encontramos a los registros regionales que reparten las direcciones IP como RIPE o compañías que gestionan grandes puntos de intercambio de tráfico como Decix. Se trata, en definitiva, de uno de los organismos fundamentales de Internet, encargado de vigilar que no se convierta en un jardín vallado al servicio de unos pocos.

El informe de IS crítica los dos sistemas más habituales empleados por Gobiernos y otras entidades para impedir que los ciudadanos accedan a sitios considerados ilegales:

El bloqueo basado en direcciones IP deniega el acceso al contenido al impedir el establecimiento de conexiones TCP/IP a direcciones IP específicas, interrumpiendo así la comunicación con los servidores que se desea bloquear.El bloqueo basado en DNS manipula el Sistema de Nombres de Dominio (DNS) al devolver respuestas falsas o engañosas cuando un usuario intenta acceder a un dominio bloqueado, haciendo que el contenido parezca inaccesible.

En España el bloqueo por IP es utilizado cada fin de semana por LaLiga y Telefónica para impedir el acceso a sitios que difunden sus contenidos, causando como efecto colateral el bloqueo de cualquier sitio legítimo alojado tras las mismas direcciones IP. Esta situación se describe con precisión el informe:

Imagine un servidor que aloja tanto un sitio de streaming pirata como un pequeño sitio de comercio electrónico bajo una misma dirección IP. Si se ordena bloquear esa IP, también se bloqueará el acceso al sitio de comercio electrónico, interrumpiendo así las actividades comerciales legítimas aunque el sitio no haya estado involucrado en la piratería.

Por otra parte, IS recuerda que estas medidas no eliminan el contenido ilegal de internet. “De todos modos, quienes decidan hacerlo encontrarán la forma de acceder”.

El informe cita como ejemplo las numerosas ocasiones en las que el sistema Piracy Shield italiano ha dejado sin acceso a los internautas del país a servicios como Google Drive o Cloudflare, al tratar de bloquear la transmisión ilegal de contenidos deportivos.

IS recomienda actuar contra la fuente y que el bloqueo sea el último recurso. Cuando se aplica, debe seguirse el debido proceso legal sujeto a revisión independiente, limitar su alcance y hacerse forma transparente. “Los proveedores de servicios de Internet u otros intermediarios no deben convertirse en agentes de facto encargados de hacer cumplir la ley”, añade.

La oposición de Internet Society a los bloqueos basados en DNS y direcciones IP se fundamenta en que estas técnicas socavan las propiedades fundamentales de Internet […]. Estos métodos de bloqueo alteran la arquitectura técnica que hace que Internet sea abierta, globalmente accesible y resiliente.

Informe